viernes, abril 28, 2006

La Ley de Igualdad


En el último barómetro del CIS sobre género que se difundió ayer hay un dato especialmente significativo por lo inquietantemente demoledor respecto a la búsqueda de la igualdad entre hombres y mujeres:

"un 29,3 % de los encuestados opinan que, cuando el trabajo escasea, los hombres tienen más derecho que las mujeres a un empleo"

¡Es demasiado fuerte!, ¿no? Cuando una persona tiene dificultades para calzar su zapato suele usar un calzador, que le facilite la acción; pero seguramente estará molesta porque el zapato le está apretado, demasiado estrecho y estará deseando volver a casa para descansar los piés. La sociedad española trata de calzarse el zapato de la igualdad entre hombre y mujeres, pero necesita de un calzador: la Ley de Igualdad. ¿Se sentirá cómoda con dicha ley?
No cabe duda que estas leyes que actúan como calzadores son necesarias para conseguir disminuir la discriminación, pero ¿dejará por ello de existir?
Más que una ley, que por supuesto es necesaria para tratar de paliar la discriminatoria situación, es imprescindible una gran labor de concenciación social ya que el dato anterior es preocupante y los demás datos del estudio, aunque favorecedores a la integración de la mujer, no son determinantes: el 67,2 % apoya la ley de igualdad, y aunque un 82, 3% opina que las disigualdades se han reducido ultimamente, el 79,7 % opina que el salario de la mujer es inferior, el 65,8 que la mujer tiene peores perspectivas de promoción profesional, el 61,2 % que tiene menos oportunidades de encontrar empleo, un 59 % menos estabilidad en los puestos de trabajo y un 77,8 % que tiene peores posibilidades de compaginar la vida laboral y familiar.
En estas encuestas, cuando leo los resultados, me pregunto siempre: ¿hubo alguna pregunta sobre las posibilidades de compaginar la vida laboral y familiar en los hombres? ¿Es que ellos no tienen esa necesidad?

2 comentarios:

Meli dijo...

A mí me alucinó de verdad el comentario de esa parte de la población que aún cree que el hombre tiene más derecho al trabajo que la mujer, sobre todo ahora que cada vez somos más las mujeres que mantenemos solas una familia y que, pese a loo que diga la Asociación de padres separados, los hombres se desentienden cada vez más de sus responsabilidades y piensan que lo podemos hacer todo solas. Sé que soy bastante escéptica en cuanto a esa igualdad que veo que solo se vuelve una desigualdad diferente, que nos exige cada vez más esfuerzo a las mujeres y proporciona más comodidad a los hombres, pero hoy en día, y cada vez más, somos las mujeres las que necesitamos más el trabajo.

Luis Manteiga Pousa dijo...

¿Igualdad? ¿Donde hay que firmar?