miércoles, junio 18, 2008

El infinito en la palma de la mano

Durante estos días que he permanecido apartada del mundanal ruido he saboreado algunas historias que me han conmovido. Quizás fuera por la sensibilidad excesiva producida por el dolor físico, o por los momentos de reflexión más personales, el caso es que he disfrutado especialmente de El infinito en la palma de la mano, Premio de Novela Breve de Seix Barral 2008, obra de Gioconda Belli.

Se trata de una recreación poética de la primera pareja de la humanidad, Adán y Eva, su expulsión del Paraíso y todo el proceso de descubrimiento del mundo, el dolor, el deseo, el amor y la muerte desde la inocencia de unos seres que no comprenden las razones de Elokim, Dios, para su creación.

Aún conociendo la historia por nuestra cultura cristiana, Belli nos arrastra en su narración al presentarnos una pareja con sus dudas, sus angustias, sus diferentes formas de sentir y de afrontar la vida. Lo más sorprendente e innovador es la relación que se establece entre los hermanos donde se amplían los sentimientos de odio, celos, envidia, culpabilidad, crueldad.

La poeta y novelista, Gioconda Belli nació en Managua, el 9 de Diciembre de 1948. Participó, desde el año 1970 en la lucha contra la dictadura de Anastasio Somoza, como miembro del Frente Sandinista. Vivió exiliada en México y Costa Rica. Ocupó varios cargos partidarios y gubernamentales en la Revolución Sandinista en los 80. Es madre de cuatro hijos y desde hace algunos años divide su tiempo entre California y Managua.

Su primer libro “Sobre la Grama (1972), ganó el premio de poesía de la Universidad Nacional de Nicaragua. En 1978, obtuvo el Premio Casa de las Américas (Cuba) por su libro “Línea de Fuego¨. Entre 1982 y 1987, publicó tres libros de poesía: “Truenos y Arco Iris”, “Amor Insurrecto” y “De la costilla de Eva”. En 1988, publicó su primera novela La Mujer Habitada que obtuvo el Premio de la Fundación de Libreros, Bibliotecarios y Editores Alemanes y el Premio Anna Seghers de la Academia de Artes de Alemania, en 1989.En 1990, publicó la segunda novela, “Sofía de los Presagios” y posteriormente el cuento para niños: “El Taller de las Mariposas” con el que ganó en 1992 el Premio Luchs del Semanario Die ZEIT. En 1996 publicó la novela “Waslala” y en 1998 otro libro de poemas: “Apogeo”. En 2001 apareció “El País bajo mi piel”, una memoria de sus años en el sandinismo, destacado como uno de los mejores libros del año por el Diario Los Angeles Times. En 2002 ganó el Premio Internacional de Poesía Generación del 27 por su poemario, “Mi íntima multitud”.En 2005, publicó “El Pergamino de la Seducción (2005) su cuarta novela y en Ocubre de 2006, ganó el Premio Internacional de Poesía Ciudad de Melilla por su poemario “Fuego Soy Apartado y Espada Puesta Lejos”. También en 2005 se publicó en Alemania un nuevo cuento de niños para adultos: “El abrazo de la enredadera”.

Sus novelas y poemas se han traducido a más de catorce idiomas. Es miembro del Pen Club Internacional y miembro correspondiente de la Academia Nicaragüense de la Lengua. Escribe para diversos periódicos nacionales e internacionales y tiene un blog en el periódico nicaragüense El Nuevo Diario y en el diario The Guardian de Londres.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me apuntaré "El infinito en la palma de la mano" como lectura para este verano.

Añado aquí un poema de Gioconda Belli que encontré hace tiempo en "El ojo de la mujer":

INSOMNIO CON PALABRAS

De noche las palabras transcurren de puntillas
discretas andan entre los objetos
temerosas del ruido se descalzan
Sobre mis hombros insomnes aletean
el poema me saca de la cama
Tanto silencio rodea mis dos manos
estas que forman signos señales de humo lazos
para llegar a otros y atravesar misteriosas distancias
Quiero decir que vivo quiero decir que quiero
que sufro que me río
que soy un amasijo de mujer al filo de la noche y el desvelo
Mujer de pájaros de estaciones de blanco y negro
Poeta mujer ávida de palabras
en un país con un idioma extraño.

Anónimo dijo...

Teniendo estas defensoras de Gioconda, no va a haber mas remedios que echarlo en la bolsa de la playa.

Anónimo dijo...

Aún no lo he podido leer. No ha llegado a las pequeñas librerías de mi ciudad pero espero este libro con ansia. Por muchas razones... porque volverá a ser un hermoso regalo de palabras, una recreación de imágenes y paisajes nunca antes vistos, una inmersión en una cultura que aún nos resulta lejana... porque nos dejará sembradas mil dudas, inquitudes y recién nacidas certezas... porque nos inundará con la inconmensurable pasión de quien la suscribe.
La espero con ansia porque será una nuevo guiño para construir un espacio de convivencia en equilibrio de seres con... o a pesar... de las diferencias de sexo.